Las batallas se juegan en las redes
La situación se ha vuelto particularmente delicada desde la invasión de Rusia a Ucrania, ya que los expertos en ciberseguridad de la OTAN, China y Rusia se enfrentan en una guerra fría online por el control de recursos estratégicos. En particular, el manejo seguro de las centrales de producción eléctrica es algo que quita el sueño a los líderes de cada país, porque una intervención externa en una central nuclear, por ejemplo, implicaría un riesgo imposible de imaginar.
Si bien los enfrentamientos de “ejércitos online” no se declaran abiertamente y es imposible decir a ciencia cierta cómo de frecuentes son, es esperable que la conflictividad en la red se agrave a medida que las guerras tradicionales se expandan en el territorio. Mantener en secreto los hackeos recíprocos es una forma que tienen los gobiernos de dar una sensación de seguridad e impenetrabilidad a los ciudadanos, que no saben nada sobre las tareas que los estados llevan adelante diariamente para evitar toda clase de ataques.
¿Por qué es útil usar una VPN?
Pese a que no sea factible prever en este momento la probabilidad de que se desate una ciberguerra abierta a los ojos de todos, asegurarse de que la información delicada esté segura en todo momento al usar internet es algo que no puede esperar. Cada vez que se accede a un sitio o se realiza una compra online, por ejemplo, se ingresan una gran cantidad de datos importantes, como los bancarios, que pueden caer en manos de estafadores. También las cookies de los portales en línea aprovechan nuestros hábitos de navegación para vendernos productos según nuestras preferencias.
Los usuarios no tienen por qué resignarse a que estas filtraciones de información sean el precio a pagar por la comodidad de usar apps y servicios online. Usando una herramienta de seguridad adicional como una VPN, es posible disfrutar de lo mejor de internet sin correr el riesgo de que nuestros datos sean comercializados como mercancía por las empresas.
Las VPN crean un túnel encriptado para proteger los datos que los usuarios transfieren desde su hogar a los servidores remotos, como los de una página web de noticias, una página de compras online o las plataformas de streaming. De esta manera, es casi imposible para un atacante “espiar” los paquetes de información que salen de un ordenador, un portátil o un móvil en su camino a la web.
Con una VPN se pueden tener también otros beneficios adicionales a la protección contra ciberataques. Gracias a que la conexión con el servidor de destino se hace pasando por un servidor de la VPN, es posible esconder la real ubicación del usuario, ya que la dirección IP del cliente permanece escondida en todo momento. Esto es particularmente útil para evitar restricciones geográficas como las de Netflix.
¿Se puede probar una VPN gratis?
Existen dos formas de acceder en forma gratuita a la protección de una VPN. Por una parte, muchas compañías ofrecen servicios gratis, pero con grandes limitaciones y prácticas cuestionables. En ciertos casos, estos proveedores tienen acuerdos comerciales con terceros con los que comparten la información de navegación de sus usuarios, lo que obviamente atenta contra la seguridad en línea.
La alternativa es recurrir a las pruebas gratis de productos VPN serios. En este caso, empresas respetadas por su fiabilidad ponen a disposición de nuevos clientes un período de prueba, para que se familiaricen con el sistema antes de tener que comprometerse a una suscripción de varios meses. Aunque no suelen dar la totalidad de las prestaciones, con una prueba gratuita es fácil comprender las bases de uso de las VPN y conocer las ventajas de esta protección.
Por eso, no esperes hasta sufrir pérdidas irreparables de información. ¡Empieza a usar una VPN hoy mismo y protégete contra los ciberdelincuentes!