La tecnología CRT fue muy popular entre la década de 1950 hasta mediados del 2000. Se utilizó en televisores primero y después en monitores de computadora. Pero con el surgimiento de la tecnología LCD y LED, han quedado en desuso. Todo esto te lo vamos a explicar en detalle a continuación.
¿Qué es un monitor CRT?
Vamos a comenzar explicando qué es CRT. Son las siglas en ingles de Cathode Ray Tube o tubo de rayo catódicos. Es una emisión controlada de electrones en un tubo al vacío. Científicos en los años 50 se dieron cuenta de que esa emisión producía sombras; y si producía sombra también produciría imágenes. Entonces agregaron algo que recogiera el efecto, resultando ser una pantalla de vidrio recubierta de fósforo y plomo. De aquí nace el televisor, un recolector de imágenes en movimiento creadas por un emisor de electrones (llamado cañón de electrones) en un tubo al vacío. Años después, con los ordenadores, llegó el monitor CRT.
Para emitir imágenes a color, son tres cañones de electrones que generan tres rayos al mismo tiempo dirigidos a una pantalla con tres tipos de fósforo brillante. Este fósforo brilla cuando capta el rayo correspondiente y crea un color. Con la combinación de los tres colores del prisma: rojo, verde y azul, se crea la imagen a color.
Por supuesto que un televisor o monitor no es solamente tres cañones de electrones y una pantalla, hay otros componentes y circuitos que ayudan al equilibrio de este proceso y también al control de la emisión de esos rayos catódicos, lo que resulta en los ajustes que se pueden hacer de la intensidad y combinación del color, además del ajuste del brillo, contraste y nitidez.
¿Por qué no volveremos a usar los monitores con «culo»?
El monitor CRT fué muy usado. La imagen que emite la tecnología CRT es la combinación de líneas horizontales en la pantalla, pero este formato, aunque se mejoró en capacidad y calidad de imagen y tamaño, tenía un tope. Con el surgimiento de más tecnologías avanzada y las exigencias actuales, salieron a la luz las pantallas LCD y LED, basadas en imágenes digitales diminutas cuadradas, los famosos «píxeles».
Entonces surgen los televisores de pantalla plana que, combinados con esta tecnología digital, sí permiten muchas mejoras de calidad de imagen y de tamaño de las pantallas. Su producción también es más barata, ya que necesita de menos componentes. Ahora el tamaño y calidad de imagen de las pantallas no tiene límites. El monitor CRT pasó a ser un aparato obsoleto, aunque esto no es del todo cierto.
Usos del monitor CRT hoy en día, en pleno siglo XXI
El monitor CRT se usa todavía en aviones, ya que existen módulos de control de los mismos que no han sufrido todavía el paso a la tecnología digital. También siguen vigentes en equipos médicos. Pero hay un uso más amplio, incluso romántico, que justifica que existan todavía y se reconstruyan.
La industria de los videojuegos tuvo sus años de surgimiento en la década de los 80 hasta los 90, donde el monitor CRT era el rey de la imagen. Estos juegos se adaptaron a este tipo de monitor e incluso exprimieron la calidad de imagen que podían emitir. Esto se logró con una combinación más efectiva de los cañones de electrones y el surgimiento de nuevos componentes que ayudaron a generar imágenes adaptadas a la alta calidad que exigían los creadores y usuarios de los videojuegos.
Esa imagen perfeccionada a través de líneas combinadas en la pantalla no la captan ni la logran los píxeles. Se ven distorsionadas y mal combinadas. Esto no es del gusto de los «gamers» o fanáticos a los videojuegos en todo el mundo (que son muchísimos, ya que es una industria multimillonaria). Gran parte de esos fanáticos son fieles a los videojuegos antiguos. Actualmente un monitor CRT se justifica nada más que por la cantidad de fanáticos que no dejan morir su pasión por estos juegos viejos, pero para muchos insuperables.
Ni podemos dejar a los aviones sin monitores de mandos de control ni podemos desaparecer a los fanáticos de los videojuegos antiguos y su pasión, por lo que el monitor CRT seguirá existiendo y en uso. No dudamos que no los usaremos más algún día, cuando ya no haya generaciones de personas fieles a los videojuegos antiguos y los aviones muden todos sus controles a nuevas tecnologías, pero por ahora eso no va a pasar.